domingo, 3 de mayo de 2009

"La deforestación favorece la aparición de nuevos virus"


Y otra nota más de los ches...

VILMA SAVY, ESPECIALISTA EN VIROLOGIA DEL INSTITUTO MALBRAN
"La deforestación favorece la aparición de nuevos virus"

Valeria Román.
vroman@clarin.com

Lamentablemente, en todo el mundo seguirán apareciendo nuevos virus que afecten la salud humana", admite la viróloga argentina Vilma Savy. "Son múltiples las razones de la emergencia de nuevos patógenos como el virus de la influenza AH1N1 que apareció en América del Norte, pero mucho tiene que ver el comportamiento de los seres humanos", señaló en una entrevista con Clarín. ¿A qué se refiere? "Los hombres estamos cambiando el clima y deforestando el planeta. Esto indirectamente favorece la emergencia de nuevos virus, porque cambiamos los hábitats naturales de los animales en cuyas células viven esos virus. Este desequilibrio aumenta las posibilidades de que se produzcan nuevos gérmenes que terminan dañando nuestra salud".

La doctora Savy dirige el grupo de investigadores que desde el 24 de abril analiza los casos sospechosos de gripe porcina en la Argentina, en su laboratorio del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas, más conocido como Instituto Malbrán: un centro de investigación de excelencia que es referente ante la Organización Mundial de la Salud.

¿Por qué afirma que el comportamiento humano influye en las futuras epidemias?

El caso del virus de la gripe aviar sirve de ejemplo: en China mantenían hacinadas a enormes cantidades de pollos. Un virus de la gripe silvestre los afectó, y así saltó a los humanos. La gente sabía que las aves estaban enfermas, pero se las comía igual. Se contagiaron el virus al manipular a los animales, y no al comerlos. Así, los primeros casos documentados de infección humana por el virus de la gripe aviar H5N1 se produjeron en 1997 en Hong Kong, y después hubo brotes en 2003 y 2005.

Con respecto al nuevo subtipo de virus de la gripe que apareció en México, Savy insistió: "Si bien aún no está claro cómo se armó el nuevo subtipo, es probable que haya contribuido el íntimo contacto entre humanos y cerdos".

Para que se desate una pandemia deben darse tres condiciones: que aparezca un nuevo subtipo de virus, que ese subtipo sea capaz de enfermar a los seres humanos y que pueda transmitirse con facilidad entre las personas. "Muchos científicos pensábamos que el virus de la gripe aviar podía llegar a desencadenar una pandemia, pero hasta ahora no lo hizo. Si bien logró transmitirse entre humanos, no tuvo eficacia suficiente para producir la pandemia".

¿El nuevo subtipo de la gripe porcina podría desatar una pandemia?

Tiene capacidad de hacerlo, porque ya pudo transmitirse rápidamente entre humanos. Pero hay muchas preguntas que aún no podemos contestar. Ya hubo muertes en México y en Estados Unidos, pero no sabemos bien cuál será la letalidad de este virus. En pandemias anteriores la mortalidad fue muy variable: en 1918 un virus de gripe porcina mató a 40 millones de personas, pero hay que considerar que recién terminaba la Primera Guerra Mundial y la gente podría haber estado con hambre y más débil. En 1957 fallecieron más de dos millones, y en 1968, cerca de un millón. También existe la posibilidad de que este virus inicialmente afecte a un grupo de gente, y que después se vaya frenando.

¿Por qué murieron más personas en México que en Estados Unidos?

Una hipótesis es que en México los médicos mandaron a analizar las muestras de los pacientes más graves ,mientras que en Estados Unidos empezaron a diagnosticar a pacientes con los primeros síntomas de gripe. Así habrían detectado el nuevo subtipo de virus en enfermos leves y esto les habría permitido ejercer un control más temprano.

¿Debemos temer la llegada de nuevos gérmenes?

El mundo está mejor preparado. En menos de una semana se pudo hallar y decodificar el genoma del nuevo subtipo de gripe, y ahora podemos hacer vacunas más rápido (para este virus podría existir una antes de fin de año) y contamos con antivirales.

¿Qué puede hacer la gente para prevenirse?

Alimentarse bien y saludablemente, evitar el estrés, lavarse las manos, usar pañuelos de papel, evitar las grandes aglomeraciones de gente. Aunque también depende de que haya una vigilancia comunitaria para detectar a tiempo los nuevos germénes.

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